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El paraje donde se ubica La Encalá es conocido popularmente como «El Pontarrón», en la aldea de Royo-Odrea (Aýna, Albacete). En plena Sierra del Segura y a las puertas del Parque Natural de los Calares del Mundo y de la Sima, el entorno ofrece numerosos alicientes: paisajes aterrazados de olivos entre bosques de pinos, espectaculares roquedos para los amantes de la escalada, y la presencia de fauna salvaje como cabra montesa, jabalí, águila perdicera y real, autillo, buitre leonado y halcón peregrino, entre otras muchas especies. Por algo es un lugar con categoría LIC (Lugar de Interés Comunitario) y ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves).
Existe una gran variedad de rutas y senderos con los que disfrutar tus pasos o pedaladas (comenzando por la ruta de la película «Amanece que no es poco»), vías ferratas, puntos de escalada, de barranquismo y zonas de baño. Pero también pintorescos cortijos y aldeas abandonadas que todavía dejan entrever sus raíces andalusíes, como también lo hacen Royo-Odrea y Aýna, con sus estrechas callejuelas empinadas y mimetizadas en las laderas rocosas del cañón. Si buscamos un poco más atrás en el tiempo, encontrarás la Cueva del Niño, uno de los yacimientos más importantes de la provincia de Albacete con sus pinturas rupestres paleolíticas y esquemáticas, y una larga secuencia de ocupación que va desde nuestros «primos» Neandertales, hasta la Edad del Bronce.
Enclavado en un entorno privilegiado de la Sierra del Segura, Aýna, conocida como «la Suiza manchega», es un destino ideal para los amantes del senderismo, la escalada y el ciclismo. Este encantador pueblo, atravesado por el río Mundo, combina naturaleza y tranquilidad en cada uno de sus rincones.
La Red de Senderos de Aýna dispone de 9 rutas de senderismo y 2 paseos urbanos, pensados para disfrutar en solitario, en pareja, con la familia o amigos. Estas rutas te llevarán a explorar los paisajes más pintorescos de la localidad y sus pedanías.
Recorrer estos senderos significa adentrarse en un paraíso natural lleno de caminos rodeados de vegetación, sendas infinitas y parajes abruptos que ofrecen una experiencia relajante y sorprendente.
Por otro lado, los paseos urbanos permiten descubrir los lugares imprescindibles de Aýna, mientras que las rutas naturales te transportan a los rincones más asombrosos, donde la belleza del entorno te invita a desconectar y disfrutar.
Existe una gran variedad de rutas y senderos con los que disfrutar tus pasos o pedaladas (comenzando por la ruta de la película «Amanece que no es poco»), vías ferratas, puntos de escalada, de barranquismo y zonas de baño. Pero también pintorescos cortijos y aldeas abandonadas que todavía dejan entrever sus raíces andalusíes, como también lo hacen Royo-Odrea y Aýna, con sus estrechas callejuelas empinadas y mimetizadas en las laderas rocosas del cañón. Si buscamos un poco más atrás en el tiempo, encontrarás la Cueva del Niño, uno de los yacimientos más importantes de la provincia de Albacete con sus pinturas rupestres paleolíticas y esquemáticas, y una larga secuencia de ocupación que va desde nuestros «primos» Neandertales, hasta la Edad del Bronce.
La Casa Rural Bioclimática La Encalá es una excelente opción de alojamiento en Aýna. Construida siguiendo principios sostenibles, brinda una experiencia cómoda y comprometida con el cuidado del medio ambiente.
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